Un encuentro causal

Erase el mes de mayo de 2008 en que una de las creadoras de este blog luego de subir y bajar del 1° al 7° Piso del Templo de la Salud finalmente fue transferida a la Dirección de Registro. Entre los constantes "Adelanteeee", logró ubicarse la letrada en un rinconcito, al lado de una puerta cuyo picaporte quedaba a la altura de su cabeza, golpeándola de manera reiterada. Su primer contacto había sido el Licenciado Juan Martín Busnelli, un hombre que años atrás gozaba de una abundante cabellera y solía -en cada oportunidad que tuviera- exhibir su CIPFA cuyo parecido con "Arnold Schwarzenegger" era incuestionable. Hoy, ya calvo, y con su carnet de Inspector Sanitario le había requerido a la Interventora el auxilio de la fuerza abogadil para dar solución a varios problemas que tenía la Oficina "4". Ya ubicada al lado del picaporte, un centanar de personas circulaban mientras Valeria decía "Me dejaron este muerto, Lau, qué hago?", el Dr. Colombo (luego "Pipi") utilizaba sus adminículos para escuchar la música de Miles Davis y Priscila -sin computadora aún- compartía escritorio. Un buen día asomó por la oficina un sujeto un tanto extraño...camisa sin una sola arruga, pantalones negros, zapatos un tanto... mmm... antiguos, lentes y campera "Alpine". Sí Sres. era el tan querido Mario Rubén Cassini. Marito para los amigos.